bajo las aguas del mar,
para ver la casa de cristal
donde habitan los peces de oro
que la quieren saludar.
Todos le quieren dar
muchos ramos de rosas
y collares de coral, y
una bata azul de cielo
para que se vaya a acostar
en la cama donde se mecen
las blancas olas del mar.
El pulpo quiere entrar
en la habitación donde está
para darle un abrazo,
quiere romper el cristal
de la ventana cerrada
por donde entró el calamar.
Alfonsina se sumerge
en la playa dorada,
donde la sirena sale a pasear
para ver las bellezas
que Mar del Plata ofrece
a todo el que va a pasear
por la orilla del mar.
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