viernes, 20 de julio de 2018

CONSEJOS DEL VIEJO ANSELMO

Pobre de aquel que llegue a la vejez y no tenga un poco de fe.
Para andar hay que tener pies, pero, para ir al cielo hay que tener fe.
Con la fe acariciada, nos llega hasta el alma.
La fe que tenemos es la que nos lleva hacia lo eterno.
La fe es la que nos da a conocer, el cómo, el cuando y el por qué.
El mundo me enseñó lo que sé, pero lo que soy me lo enseña la fe.
En el cielo del amanecer, sólo se ven las estrellas de la fe.
Déjame un poco de fe y te mostraré en lo que hay que creer.
La fe es la que nos alienta, para vencer la pereza.
Por medio de la fe podemos aclarar el misterio de la eternidad.
La base de nuestra existencia, con la fe se complementa.
La fe en lo que hay después, es la que nos libra de padecer.
La fe que más se humilla, es más alta cuando está de rodillas.
Quien con la fe no camina, no doblará ni la esquina. 
Con la fe que tenemos, todo lo alcanzaremos.
Si renunciamos a la fe, no seremos lo que queremos ser.
La fe es la que nos hace sentir la esperanza de vivir.
La ausencia de la fe, aumenta nuestro padecer.
Con la fe hasta se consigue, ver la causa de nuestro origen.
La fe que no se ve, es la que da aliento a nuestro ser.
Para librarnos de la tentación, la fe es lo mejor.
La fe del que más ora, jamás lo traiciona.
La fe es como un instinto que nos llega desde el infinito.
La fe es la que sirve de almohada, para que descanse el alma.
La fe es como una voz interior, que nos anuncia la presencia de Dios.
Hay que procurar tener viva la fe, para que nos ayude a creer.
El que acaricia la fe, sabe de Dios lo que debe saber.
Con la fe podemos hallar, el camino de la eternidad.
La fe es la que más nos acerca, para ser personas perfectas.
Cuando la fe está a nuestro lado, nos sentimos mas amados.
La fe duplica el fervor, y divide el dolor.
La fe es quien nos consuela y nos muestra la vida eterna.
La fe que el alma siente, no hace caso a la opinión de la gente.
La fe es a la vez: el testigo, el fiscal y el juez.
La fe es la que da a conocer, las faltas que podemos tener.
La fe es la que nos enseña, que Dios controla la tierra.
La fe nos enseña a razonar en lo que tenemos que pensar.
La fe es la que nos enseña a solucionar los problemas.
En la fe está el libro inmortal que habla de la eternidad.
La fe es la que nos da la fuerza para avanzar.
La fe es el regalo más preciado que Dios nos ha dado.
La fe de nuestra existencia, la llevamos en la conciencia.
La fe es la voz del alma que con Dios habla.
La fe es un instinto divino, que nos viene desde el infinito.
La fe es la voz interior que anuncia la presencia de Dios.
La fe más vieja, siempre tiene la puerta abierta.
La fe es la mejor cosa para mostrarnos la vida gloriosa.
Escribiendo sobre la fe, ¡ cuánto se puede aprender!
Para ir hacia Dios a pie, necesitamos el bastón de la fe.

Con estos consejos del viejo Anselmo,
quizás podrás tener un poco más de fe.
         ¡Que Dios te la dé!

No hay comentarios:

Publicar un comentario