REQUIÉN PARA UN CARTERO
Bajo un majestuoso y estrellado firmamento
camina el viejo Anselmo
llevando los noventa años
en su cansado cuerpo .
Cuando mi tiempo se termine
solo quiero que haya una tumba
donde yo pueda dormir,
si contento yo viví,
quiero morir contento
y sin tener que sufrir.
En mi tumba podéis grabar
AQUÍ ESTÁ EL QUE QUISO ESTAR
El cartero que tenía tanta amistad
y buscó en Chapela la eterna paz.
Todo se acaba y no vuelve más
solo queda el recuerdo
velando por el cartero
que en el paraíso eterno
podrá al fin descansar.
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